Una madre local quiere darles un reconocimiento a sus hijas por socorrerla cuando más lo necesitó.
El miércoles pasado Kimberly Morris estaba con sus hijas cuando se tropezó con unos cables y cayó en el concreto.
No se podía levantar al sentir sus huesos rotos, pero en ese momento sus hijas de 7 y 8 años Violet y Lilly entraron en acción.
Lilly cruzó la calle para buscar ayuda y Violet llamó al 911.
Morris dice que se fracturó dos huesos en su brazo derecho y su fémur.
Ella es enfermera y su esposo es un médico de emergencias.
Morris dice que les han enseñado a sus hijas qué hacer durante una emergencia y al parecer pusieron mucha atención.