John Henry Ramirez, el hombre que mató a un empleado de una tienda de servicio rápido durante un robo -- será ejecutado el miércoles por la noche.
En julio del 2004, Pablo Castro estaba sacando la basura en la tienda Times Market que estaba en la calle Baldwin cuando Ramirez lo degolló y lo acuchilló más de una docena de veces.
Ramirez escapó con un motín de un $1.25 centavos y estuvo prófugo de la justicia hasta el año 2008 -- cuando fue detenido cerca de Brownsville.
Ramirez fue sentenciado a muerte, pero en dos ocasiones se libró de ser ejecutado.
En una de las ocasiones fue porque pidió nuevo abogado y el año pasado, fue debido a la pandemia.
Recientemente, Ramirez intentó demandar a los funcionarios de la cárcel porque quería que su pastor colocara sus manos sobre él durante su ejecución, pero la corte de apelaciones del quinto circuito rechazó esa demanda.
Aaron Castro, uno de los hijos de Pablo Castro, dijo que está frustrado con el proceso que ha tomado tanto tiempo y ya es hora de que Ramirez pague por lo que hizo.
“Como he dicho antes, hiciste algo malo, hiciste algo horrendo”, dijo. “Hiciste algo que afecto la vida de muchas personas, y no hay nada que te pueda sacar de este problema. Llegó tu hora”.
Ramirez no estaba solo esa fatídica noche, dos mujeres lo acompañaban: Christina Chavez y Angela Rodriguez.
Chavez está cumpliendo una sentencia de 25 años por asesinato y Rodriguez está cumpliendo 99 años en prisión por robo agravado.
