Un gran jurado del condado Nueces emitió hoy la máxima sentencia en contra de un hombre hallado culpable de homicidio involuntario y causar un accidente que resultó en muerte.
Se trata de Jason Auvenshine quien fue sentenciado a cadena perpetua.
Él fue condenado el martes pasado por atropellar y matar a Brandon Phelps en marzo del año pasado.
Según testigos, Phelps estaba usando su patineta tras dejar una fiesta y fue entonces que Auvenshine lo atropelló.
El acusado huyó del lugar, pero regresó momentos después.
Los fiscales argumentan que Auvenshine estaba bajo la influencia del alcohol y utilizando su teléfono al momento del accidente.