Un niño de 5 años en Corpus Christi está tomando las calles en lugar de los parques infantiles, abogando por su padre que fue deportado a México en marzo.
"Él ve a la gente, ve a los que están protestando y enseguida dice 'mamá tenemos que ir' y todo por sí mismo, 'quiero hacerlo por mi papá'. Él dice 'tenemos que manifestarnos, tenemos que ir, tenemos que apoyar'", dijo la madre de Vinny.
Han pasado meses desde que sus vidas cambiaron. La madre de Vinny, quien permanece anónima por razones de seguridad, recuerda el momento. Ella dice que el agente de ICE vestía ropa normal y conducía un auto común.
"Él ya tenía sospechas de que ICE lo estaba siguiendo porque veía un auto siguiéndolo por todas partes. En su trabajo, y él trabajaba en Port Aransas", dijo.
Ella dice que meses después, todavía vive con miedo – un miedo que no entiende, especialmente siendo ciudadana estadounidense.
"Incluso vino a mi lugar de trabajo buscándome, queriendo preguntarme cosas, queriendo saber sobre él, queriendo saber sobre mi hijo, queriendo entrar a mi casa", dijo la madre de Vinny.
Vinny me dijo que extraña a su padre.
"Quiero que mi papi venga a mi cumpleaños", dijo Vinny.
Mientras espera que ese sueño se convierta en realidad, él sabe una cosa.
"Necesito apoyar a mi papi porque está en México", dijo Vinny.
Esta historia fue reportada al aire por un periodista y ha sido convertida a esta plataforma con la asistencia de IA. Nuestro equipo editorial verifica todos los reportajes en todas las plataformas para garantizar imparcialidad y precisión.
